Un vez más, los Servicios Sociales del Ayuntamiento de El Franco han contado con nosotras para llevar a cabo varias acciones formativas incluidas dentro de su programación anual.

En esta ocasión hemos desarrollado dos talleres:

1. El taller de pensamientos automáticos.
2. El taller de gestión de mi tiempo.

Hemos comenzado tratando de reflexionar sobre cómo y hasta qué punto nos condiciona nuestra vida aquello que pensamos, generalmente de forma inconsciente y sin darnos cuenta. Cómo influyen estos pensamientos en nuestra emociones, sentimientos y finalmente, cómo se traducen en nuestros actos, los hechos. Para ello, es imprescindible analizar la forma en la que percibimos nuestra realidad y cómo la narramos.

Albert Einstein decía, la mente es como un paracaídas, solo funciona si se abre.

No podemos separar los pensamientos, las emociones y las acciones. Estos tres conceptos están íntimamente relacionados. Por ello, resulta tan importante analizar de forma detallada las charlas que mantenemos con nosotros/as mismos/as, pues es la interpretación, las conclusiones, de lo que nos decimos sobre nuestra experiencia la que crean ansiedad, frustración, desánimo, etc. es decir, ser convierten en emoción, y finalmente nuestras emociones se convierten en hechos.

Para practicar todas estas cuestiones hemos analizado nuestro lenguaje, examinando los 15 pensamientos deformados más comunes, fijándonos en aquellos que más utilizamos en nuestra vida cotidiana, como pueden ser: el pensamiento polarizado, la sobregeneralización, la visión catastrófica, las etiquetas, la culpabilidad, etc.

Descubrirlos e identificarlos es el primer paso para adquirir y poner en marcha las habilidades necesarias para combatirlos.

Relacionado con todas estas cuestiones en el taller de gestión de mi tiempo, nos hemos centrado en los hechos, es decir, los hechos que ocupan nuestra vida actualmente, los que ya hemos realizado y están finalizados, y los que nos quedan por hacer.

Nuestra vida es lo que hacemos todos los días en ella, por ello debemos pensar en la mejor forma de rellenarla y ocuparla, tomando decisiones, impregnando de ilusión cada pequeño proyecto, de lo contrario, el tiempo pasará sin más y la desidia, monotonía y aburrimiento serán las dueñas de nuestro día a día.

Pocas veces pensamos de forma consciente en lo que hemos invertido nuestro tiempo y en lo que lo vamos a invertir el que nos queda, en el punto en el que estamos actualmente, y a donde queremos llegar. No basta simplemente con querer o desear conseguir algo, si no lo convertimos en hechos. Si no nos marcamos un plan de acción de manera que sepamos todos los pasos a seguir para conseguir el objetivo final, nos quedaremos sencillamente en el deseo, en el sueño, y ya se sabe que los sueños, sueños son. Para conseguirlos debemos transformarlos en objetivos y pasar a la acción.

Y precisamente eso es lo que hemos logrado, dar ese paso que sin saber la razón -quizá por miedo e inseguridad- cuesta tanto dar para comenzar un camino sin retorno, que es simplemente comenzar hacer: hacer cosas para mejorar la vida, para ilusionarme, para motivarme, para sentirme dueña/o de mi tiempo y en definitiva de mi vida. En este sentido, no podemos hacer otra cosa que felicitar a las personas que han participado en los talleres, ya que cada una de ellas teniendo en cuenta sus circunstancias personales, se ha puesto maños a obra. Han comenzado a tomar decisiones, marcarse retos que sin duda cambiarán su día a día de manera positiva.

¡¡Enhorabuena por el cambio!!

Si amas la vida no malgastes el tiempo,
porque de tiempo se compone la vida Benjamín Franklin.

Agradecer una vez más a los Servicios Sociales del Ayuntamiento de El Franco, su colaboración y disposición para trabajar siempre en equipo, sin perder de vista nunca lo que necesitan y es mejor para las personas.